La red oculta de la vida, de Merlin Sheldrake

Hace un par de meses asistí a Soiluzioak, el Congreso de Protección del Suelo de Euskadi, en el que no solo aprendí muchísimo sobre la biodiversidad del suelo y su función en la mitigación de la crisis climática, sino que también me llevé una buena lista de lecturas para seguir profundizando en los temas que se trataron.

Cubierta de libro «La red oculta de la vida».

Uno de los libros que más me llamaron la atención fue La red oculta de la vida, de Merlin Sheldrake (traducido por Ton Gras Cardona), una obra sobre los hongos que nos recomendó Carlos Garbisu y que me ha parecido absolutamente fascinante además de instructiva.

Los hongos son organismos imprescindibles para la vida en el planeta y, aun así, siguen siendo unos grandes desconocidos: solo se ha descrito el 6 % de todas las especies del mundo, cuya cifra se estima entre los 2,2 y los 3,8 millones. Aunque en los últimos años se ha avanzado mucho en su investigación, todavía quedan multitud de incógnitas por resolver sobre el comportamiento de los hongos y sus relaciones con otros seres vivos.

Con un estilo ameno en el que alterna la experiencia propia y numerosos experimentos llevados a cabo por sus colegas, Sheldrake explica que el estudio de los hongos le ha hecho replantearse multitud de conceptos que creía tener claros: por ejemplo, la inteligencia, pues los hongos parecen ser capaces de aprender, comunicarse y tomar decisiones pese a no tener cerebro; la individualidad, sobre la que arrojan dudas las estrechas relaciones entre los hongos y otros organismos; y los ecosistemas, que en gran medida dependen de las redes fúngicas (la denominada Wood Wide Web) que conectan las raíces de las plantas y resultan de vital importancia para la descomposición y el ciclo del carbono.

Por si no bastara con las numerosas aportaciones de los hongos a la sostenibilidad del planeta tal y como lo conocemos, el autor también estudia la influencia que estos seres han tenido en la cultura humana, desde las setas mágicas y los antibióticos provenientes de los hongos hasta las levaduras que utilizamos para producir alimentos y bebidas, pasando por los usos modernos de los hongos en la construcción, la eliminación de residuos, la restauración de ecosistemas degradados.

Desde luego, ha sido una lectura interesantísima y muy recomendable para cualquiera que tenga interés en aprender más sobre el mundo de los hongos.

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